Cómo afrontar, desde casa, la falta de motivación en las actividades extraescolares

falta de motivación

Cómo afrontar, desde casa, la falta de motivación en las actividades extraescolares

DECÁLOGO PARA PAPÁS Y MAMÁS (de adolescentes)

  1.  Muestra interés por las actividades que realiza. Indaga lo que aprende, cómo se divierte y valora siempre su esfuerzo.
  2. Establece un espacio para que pueda expresar las razones por las que está perdiendo motivación o ya no le apetece ir. ¿Qué está pasando? escúchale para averiguar que hay detrás de ese cambio.
  3. Escucha todo lo que tiene que decir, ponte en su lugar y expresa tus propios sentimientos acerca de cómo te sientes tú en situaciones similares. Eso les ayuda a entender y a normalizar la situación (“es humano que, a veces, no te apetezca o que ya no te guste algo con lo que antes disfrutabas”)
  4. Revisa los motivos por lo que se apuntó a la actividad e indaga si alguno ha cambiado. Puedes hablar también con su profesor/a, seguro que puede aportarte información útil. Es importante que, antes de hablar, lo consultes con tu hijo/a y que entienda que lo haces para ayudar. Sería interesante que acudieras con tu hijo/a.
  5. Crea un listado junto a tu hijo/a de las ventajas de asistir a la actividad y de los inconvenientes de no acudir a la misma. Seguro que os da información muy valiosa.
  6. Habla de la responsabilidad a la hora de cumplir con los compromisos adquiridos como un signo de madurez y crecimiento. Además, hazle ver que cada miembro de la familia ha generado una rutina entorno a su actividad, que estáis comprometidos con ella.
  7.     Establece alguna actividad que sea de su agrado como un refuerzo a su esfuerzo. Intenta hacerla después de salir de clase extraescolar.
  8. Fija un plazo razonable de tiempo para finalizar la actividad en el caso de que la  actitud siga siendo la misma. Por ejemplo, si ya habéis pagado por adelantado el mes o el trimestre. Es importante que se comprometa a realizarla, por lo menos, ese tiempo marcado.  De esta manera, intentamos que se responsabilice también, de forma simbólica, del gasto que ha supuesto haberlo apuntado.
  9.  Explica que vas a apoyarlo/la y que puede contar contigo para expresar sus sentimientos al respecto.
  10. Fomenta la implicación en la toma de decisiones. Puedes pedirle que aporte soluciones al problema, intentando llegar a acuerdos. Que te diga qué hará si no realiza, definitivamente,  la actividad. Recuerda que es fundamental que las actividades extraescolares se disfruten, si no, pierden parte de su sentido.

 

Elaborado por Ana Piñar (psicóloga sanitaria y directora del centro).